Cuando uno es fanático de Enrique Bunbury, puede tener al menos la certeza de una cosa: no habrá escasez de discos nuevos. Tan solo desde 2017, ha lanzado 4 discos y un EP, lo que suma, junto a los anteriores, un total de 13 discos de estudio como solista, (incluyendo el Unplugged). Ahora que ha anunciado su retiro de los escenarios debido a motivos de salud, es probable que incluso veamos un aumento en la frecuencia de sus lanzamientos.
Greta Garbo es el primer disco que lanza desde que anunció su retiro de las giras y los conciertos. Al igual que sus discos anteriores (y siguiendo la mejor tradición de Bowie), esta entrega no sigue el sonido de sus trabajos recientes.
Mientras que sus predecesores directos, "Curso de Levitación Intensivo" y especialmente "Posible" (ambos lanzados en 2020), estaban llenos de sintetizadores y una elaboración compleja de capas sonoras, Greta Garbo es musicalmente simple, con un sonido pop-rock sencillo y bastante tradicional, incluso ligero. Acordes rítmicos de guitarras eléctricas relativamente limpias, pianos y un poco de órgano, sobre un ritmo básico. Y eso es todo.
Me recuerda al sonido de los años 70, que parece ser la referencia sonora en Greta Garbo. "Para ser Inolvidables" incluso presenta un ritmo estilo disco y un final que recuerda mucho a "I Robot" de Alan Parsons. "Invulnerables", el primer sencillo lanzado, me hace pensar en el extraño pop de Talking Heads. Un par de canciones parecen estar basadas directamente en la emblemática parte rítmica de la sección central de "Echoes" de Pink Floyd.
Esto puede sonar interesante al leerlo, pero esos momentos solo ocurren ocasionalmente, y son pocos. El sonido predominante del álbum es ese pop-rock sencillo que evoca la estética de los años 70, que me resulta bastante aburrido, y a veces incluso tedioso y demasiado dulce. Siempre dentro del mismo marco instrumental de arreglos simples, donde se puede escuchar perfectamente el espacio entre los instrumentos.
Una cosa que puedo apreciar mucho es el uso de pianos limpios con acordes prolongados y armónicos, como en la balada "Desaparecer" o en una de las canciones más oscuras del disco, "La Tormenta Perfecta" (que además incluye unas deliciosas congas).
Y hablando de oscuridad, al referirse a las canciones y discos de Bunbury, hay que separar lo musical de lo lírico, y me complace informar que al menos en lo que respecta a las letras, Bunbury sigue siendo tan elaborado y oscuro como siempre.
A mi criterio, la fortaleza del disco se encuentra en las letras. En discos anteriores, Bunbury ha utilizado algunas veces un estilo más directo y claro. En "Greta Garbo", continúa con el patrón lírico elaborado, oscuro, medio críptico y algunos dirían incluso filosófico, que ha caracterizado sus últimos discos, comenzando desde "Expectativas" (2017).
En mi opinión, "Expectativas" es el primer disco de su carrera en solitario en el que las letras evocan claramente la intensidad y profundad de las de su época con Héroes del Silencio. Personalmente, es el estilo de Bunbury que más disfruto, así que me agrada encontrar ese elemento en "Greta Garbo", donde su esfuerzo y calidad lírica son evidentes.
¿Es "Greta Garbo" uno de los discos esenciales de Bunbury? No lo creo. Sin embargo, tiene sus momentos, y si disfrutas de la música de Bunbury, considero que es un disco que vale la pena escuchar.
