Si hay un género musical que ha tomado al mundo por sorpresa durante la última década, permeando barreras culturales y capturando a muchos, es el K-Pop. Algunos artistas K-Pop han alcanzado considerable éxito a nivel mundial, y tanto en visibilidad como en impacto cultural, podríamos considerar al K-pop casi un género mainstream.
Y es que el K-Pop, como un híbrido de muchos géneros, desde hip-hop, R&B, EDM y varios elementos que podríamos asociar con el J-Pop, tiene mucho potencial para alcanzar un público amplio. Además, incorpora una estética visual que hace que sus artistas sean verdaderos fenómenos de entretenimiento.
Uno de los actos K-Pop más recientes, y que ha alcanzado mucho éxito, es el girl-group Aespa, (su nombre es comúnmente estilizado en minúsculas, o æspa.) El grupo hizo su debut en el año de la pandemia, 2020, alcanzando rápidamente altas visualizaciones de los videos de sus primeros sencillos. Desde entonces su música ha obtenido consistentemente puestos altos en listas de éxitos a nivel global
La banda además produce cortometrajes futuristas, que mezclan música con visuales muy interesantes, con un concepto de realidad virtual donde cada miembro de la banda tiene una contraparte virtual, o una versión “ae”, dentro de un universo con narrativas particulares que contribuyen a la mitología del grupo. Este enfoque no solo los diferencia en el panorama del K-Pop, sino que también los posiciona como pioneros en la integración de la tecnología y la música.
Este año lanzaron su primer álbum completo de estudio, titulado Armageddon, un ambicioso disco con una producción de muy alta calidad, mucha energía, y sonidos futuristas. Una mezcla de hip-hop, pop y música electrónica, con ambientes sónicos que varían desde un frío de carácter amenazador y disonante, hasta un pop sacarino.
Las melodías son modernas, innovadoras y extremadamente pegajosas, diseñadas deliberadamente para pasar resonando en la mente del oyente por mucho tiempo después de haberlas oído, y ejecutadas con tanta actitud que hasta pueden resultar un poco intimidantes. Las voces de las 4 chicas que conforman Aespa combinan muy bien, y ellas cantan con una precisión afilada y dinámica.
Las canciones se conforman de diferentes partes y arreglos que a veces parecieran surgir de la nada, de una forma que puede resultar un poco desconcertante, como si fueran canciones creadas más por una intención de entretener, sorprender y enganchar al oyente cada segundo, que por contar una historia unificada. Siempre he pensado que esta tendencia a ser como un collage de partes casi al azar es una característica del K-Pop, que refleja bien su naturaleza como una fusión de diversos estilos musicales. Armageddon lleva esto a otro nivel.
Y bueno, no hay razón por la que una canción deba tener siempre un sentido musical estricto basado en algo como armonías y estructuras tradicionales. Esto es pop, diseñado para entretener y encantar al oyente, y en este sentido Armageddon me parece un tremendo acierto. Aunque debo decir que la primera mitad del disco me parece que tiene material más fuerte, mientras que la segunda mitad me suena más moderado y dulce.
No solo la producción de Armageddon es de muy alta calidad, además hay que considerar que la música de Aespa es solo una parte de todo el paquete, el cual incluye otros elementos igual de importantes, tal como los videos y cortometrajes con sus elaboradas visuales, la temática futurista del grupo con su énfasis en realidad virtual, y por supuesto, uno de los elementos más emblemáticos de todo K-Pop, las elaboradas y enérgicas coreografías que realizan las atractivas miembros de Aespa al interpretar sus canciones.
Este aspecto coreográfico es realmente impactante. Debo de confesar que conocí y me interesé por el grupo después de toparme con algunos de sus reels en concierto, y apreciar (entre otras cosas,) sus coreografías.
Como ellas mismas expresaron en una entrevista, se trata de un concepto de "música que puedes ver."
Algo a tomar en cuenta es que Aespa, más que una banda, es el resultado de un proyecto diseñado minuciosamente para maximizar la conquista del mundo del K-Pop y la industria musical global. El grupo fue creado y dirigido por la compañía coreana de entretenimiento “SM Entertainment,” que hizo la planificación, la audición de las chicas, y la producción de su música, la cual es creada por un diverso arsenal de compositores y productores. La compañía además se encarga del desarrollo de los videos, conciertos y la publicidad.
Considerando esto, las miembros de la banda solo son un elemento de todo el universo que compone lo que es Aespa. Quizás solo su atractivo rostro, por así decirlo. Esto no les resta mérito. Para haber sido elegidas para estar ahí se necesita de varios años de duro entrenamiento multidisciplinario, además de mucho talento, lo cual las chicas tienen de sobra. Creo que el resultado es solo una forma, distinta a la tradicional, de realizar una producción musical.
Esto es pop moderno de muy alta calidad, con elementos adicionales visuales, temáticos y originales, que amplían la experiencia del oyente. Los fanáticos del K-Pop van a conectar con el universo de Aespa inmediatamente. Y a los fanáticos del hip-hop, música electrónica o j-pop, que se han mantenido en la periferia de este género musical, les recomiendo darle la oportunidad a Armageddon. Por mi parte puedo decir que continuaré siguiéndole la pista a Aespa y disfrutando de sus futuros lanzamientos, y mantendré mi curiosidad sobre el futuro del K-Pop.
